Capítulo 66 : Reconociendo la ciudad

Esperemos hasta las 17:00 para reprender el camino hacia el empleo, pero no hubo suerte, aun así dejamos un par de curriculums en varios sitios ETTs.

Regresamos a la habitación del hotel, de camino fuimos mirando si había alguna habitación por el centro donde poder quedarnos a vivir. Ya que es donde decidimos que si salía algo de trabajo nos quedariamos allí, cogimos varios números pero ya cuando volvimos se nos hizo tarde, así que mejor dejarlo para mañana.


Al dia siguiente . . .


En cuanto me levante llame al primer número para la habitación y fuimos a visitarlo, la habitación no estaba mal pero un poco pequeña, pero la tendriamos en cuenta, por si las demás no cumplían los requisitos, la verdad que todo lo demás estaba en buen estado y nos dejaban hacer uso de la cocina.

En cuanto salimos del portal llame al otro numero, fuimos al rato a verlo y bueno más o menos estaban los dos por igual, así que no nos hizo falta llamar a los demás y nos decidimos quedar con el primero por que a la vez que era mas económico, habia ascensor.

Llamamos sin perder tiempo y por suerte aún no había nadie que se quedara con ella, así que nos fuimos a darle el visto bueno, además de darle el adelanto que nos pedía. Regresamos al hotel de la estación y le dijimos que ya nos íbamos, pagamos los dos días que estuvimos y nos marchamos hacia nuestro nuevo hogar temporal.

Al llegar a la casa nueva, nos instalamos en la habitación. La verdad que se me hacia muy raro estar en una casa conviviendo con gente extraña, pero era lo unico que podiamos hacer en este tiempo de transición, antes de mudarnos a una casa solos. Además seguro que aquí no nos encontrarán siendo que estamos con mas gente, nuestro rastro se borra o por lo menos somos menos perceptibles.

Por la tarde salimos a reconocer el terreno y a ver las diferentes iglesias y monumentos que no vimos ayer. Comenzamos la ruta hacia allí, encontramos el mercado grande, llamado Mercado Central. Después  un poco más adelante el monumento a Julio Cesar, por la conquista de la ciudad a la que le puso el nombre de Caesar Augusta. Y al fondo de la misma calle las murallas que aún quedaban en pie de ese tiempo.

Luego nos metimos por el lado derecho otra vez, vimos de frente una iglesia que se llamaba San Juan de los Panetes, llamativa y hermosa. Continuamos hacia la derecha y volvimos a ver otra vez la maravillosa cascada que el dia anterior ya nos hicimos fotos para el recuerdo.

Entramos a la basílica llamada Del Pilar. Entramos y había gente que se santiguaba en una pila con agujeros donde cogian agua y se hacian al señal de la santa cruz, yo lo hice tambien por que seguro era algo tipico de aqui, e igual me miraban mal si no lo hacia.

Era asombroso todo, miraras donde miraras, era admirable lo bonito y pintado que estaba, seguro que todo pintado a mano desde hace muchos años. A lo lejos escuche a un hombre hablando o recitando versos de lo que podía ser la biblia, me dijo Lucas que se escuchaba una misa, nos acercamos lucas y yo por donde provenían las voces. Lo que más me llamo la atención era un altar a la derecha con un busto de una virgen vestida con un manto rojo, que significaba todo aquello.

Por un momento me dio miedo de estar allí, y con sumo cuidado me salí lo más despacio posible, sentía como si alguien me dijera que no podia estar ahi, aunque tampoco le tome demasiada importancia. Cuando sali ya me encontraba algo mejor, al minuto ya salia Lucas detras de mi.

- Estas bien Daniela? . . . Te pasa algo ?

Daniela - Tranquilo estoy bien, cuando vi ese manto rojo de pronto me dieron ganas de huir de allí, pero ya estoy mejor no te preocupes.

Lucas - Puede ser el agua que había en la pila? . . . yo no lo hice y estaba bien.

Daniela - Posiblemente, ahora que lo recuerdo, los ojos se me fueron al busto de la virgen y fue ahí cuando me empecé a encontrarme mal.

Una vez fuera me llamó la atención una fuente con unos niños jugando, uno de ellos sujetaba un pez donde salía agua a chorros, hasta me salio una leve sonrisa, era super gracioso. Seguidamente fuimos hacia el fondo de la calle donde había un museo llamado La Lonja, entramos y dentro habia un monton de cuadros de gente importante, dimos un paseo mirándolos y salimos. No es una cosa que en especial tenga interés pero si que está bien tener una cierta culturilla general.

De frente al salir del museo vi un monumento, me acerque y en una placa vi que nos contaba la historia de Francisco Goya, un famoso pintor Aragonés. Pasamos la Lonja y al fondo vimos un museo en forma de cuadrado llamado Foro, supongo que habrá más información sobre la historia de la ciudad. A su lado la hermosa catedral de San Salvador, blanca toda ella, con arquitectura románica, gótica y barroca. Vaya por lo visto aqui en esta ciudad ha habido diferentes conquistadores que han dejado un poco de su estilo arquitectónico.

Volvimos a una calle llamada Don Jaime I donde estaba todo cubierto de tiendas, y lo que me llamó la atención es que era totalmente peatonal, podías pasear sin miedo a que te atropellaran. Lo bueno que ya mas o menos esta zona ya se nos hacia conocida por que ya paseamos ayer. Al final de la tarde y casi de noches terminamos cenando otra vez en el mcdonalds, pero será de las últimas veces ya que  no teníamos comida, cenamos y volvimos a la habitación.

A la mañana siguiente . . .

Sono el movil a las 9 de la mañana a Lucas, medio dormido contestó, por lo poco que escuche creo que era por un posible trabajo, supongo que cuando terminara de la llamada me lo contaría, cuando colgó . . .

- Daniela tengo entrevista de trabajo para esta tarde, por que necesitan personal para ya, les gusto mucho mi curriculum y tengo posibilidades de conseguir el trabajo en un taller.

Daniela - Que buena suerte has tenido . . . Espero que te cojan amor, necesitamos mas que nunca un trabajo los dos si es posible.

Lucas - Claro que lo conseguiremos, no pierdas la fe algo te saldrá, tenemos toda esta mañana para acompañarte y entregar curriculums.

Nos arreglamos, bajamos las escaleras y nos fuimos a tomar un café al bar de abajo, cuando salimos seguimos toda la mañana entregando curriculums, en todos los sitios que posiblemente necesitarán gente.

A la vuelta nos metimos al super que teníamos cerca de casa y compramos para unos días, después ya nos iriamos apañando con lo que podamos. Cuando llegamos a casa le preguntamos al dueño del piso donde podíamos dejar las cosas en la nevera. El muy amable nos dejo mitad de nevera, ordenamos todo como pudimos y empezamos a hacer la comida.


Continuara . . .