Seguimos caminando y llegamos a un acuario, un edificio cuadrado de ladrillo.
- Lucas deberíamos entrar algun dia para ver que ahí en ese acuario
Lucas - Claro que si amor, aunque parece que sea un poco caro, nos tendremos que informar de cuanto vale y si nos lo podemos permitir.
Daniela - Vale, vayamos a ver si en la puerta están la lista.
Fuimos hacia la puerta, en cuanto llegamos vimos que solo estaba el horario de visita, por ningún lado estaba cuánto costaba la entrada. Seguimos viendo todo lo demás hasta llegar a un hombre sentado hecho de letras, era impresionante, la cantidad de letras que han debido hacer para completar este monumento, al mismo paso nos tomamos varias fotos para el recuerdo y a mano derecha vimos un edificio en forma de gota, nos pareció gracioso a primera vista pero luego nos gusto, tambien le tomamos fotos y poco a poco volvimos a casa.
Cuando llegamos a casa, nos pareció raro que Raúl no estuviera, pero no le dimos importancia, nos fuimos al salón y nos pusimos un rato la tele hasta la hora de cenar, como a las nueve de la noche llegó Raúl, con un chándal poco inusual, siempre iba vestido con camisa y polo en la parte de arriba, y pantalones de pana.
Raúl - Como estais chicos, acabo de venir de dar un paseo.
Daniela y Lucas - Muy bien nos parece, espero que haya disfrutado del paseo
Raúl - Si, de vez en cuando está bien estirar un poco las piernas.
Y se marchó hacia su habitación, nosotros seguimos viendo la televisión.
Al rato nos marchamos a la cocina, empezamos a hacer la cena, esta vez sacamos carne que teníamos y arroz blanco.
Lucas - Buena combinación, si señor . . . le salió un sonrisa de oreja a oreja . . .
Daniela - Lo se que te encanta, . . . y le saque la lenguita picara . . .
Y los dos nos reímos como tontos.
Entonces Raúl entró en la cocina, y dijo:
- Que bien os lo pasáis pajaros, así me gusta que haya alegría en la casa.
Daniela y Lucas - Como ha de ser.
Raúl - Bueno os dejo que terminen para empezar yo, que ya tengo hambre. . . se sonrió irónicamente . . .
Cuando continuamos con la cena, el arroz ya lo tenía terminado, hicimos la carne en un santiamén y cenamos en el salón, mientras yo terminaba la carne, Lucas ya preparo la mesa así que solo teníamos que llevar el plato con comida, así que me adelante a fregar las sartenes y lo que había utilizado hasta el momento.
Raúl - Bueno ahora me toca a mi, buen provecho jóvenes.
Daniela y Lucas - Muchas gracias, igualmente Raúl
Y se fue a la cocina, una vez solos comenzamos a comer,
Lucas - Mañana el gran día amor, tu primer día.
Daniela - Cariño no me digas eso que me voy a poner nerviosa, hasta ahora no me había acordado de eso.
Lucas - Pero si seguro que lo haces genial, ademas algo de experiencia tienes, esta vez no te quedes encerrada porfa - . . . Soltó un carcajada . . . y le respondí con una colleja . . . - Amor que no lo dije par que te molestaras.
Daniela - Ese caso ya sabes por que fue que me quede encerrada, así que no lo vuelvas a decir ni en broma, es de mal gusto, lo pase fatal y tu lo sabes.
Lucas - Tranquila mi amor, que todo estará bien ya veras.
Cuando terminamos de cenar, nos levantamos y llevamos todo a la cocina, me quede fregando mientras Raúl terminaba de prepararse una tortilla francesa con chorizo,
- Vaya Raúl, veo que eres un cocinillas, vaya cena rica y fácil te has preparado.
Raúl - Hija por la noche ahi que comer poco, por que no lo quemamos.
Daniela - Es cierto . . . Me salio una sonrisa . . . - bueno Raúl que descanse, me voy a ir a la cama que mañana me toca trabajar.
Raúl - Espero que te vaya bien el primer día.
Y me marche para mi habitación, por desgracia Lucas ya estaba dormido así que me metí en la cama, y enseguida me dormí, teníamos que hacer mas veces el paseo por la rivera del Ebro, te deja super relajado para luego dormir.
Al día siguiente . . .
Me levanté con una energía inusual, me gusta levantarme con las pilas cargadas para iniciar mi nuevo trabajo con alegría.
Mire a mi lado y ya Lucas ya no estaba, supongo que se abría ido a trabajar, me prepare un desayuno rápido, le di los buenos días a Raúl que estaba en el salón viendo la TV, salí por la puerta decidida en que hoy iba a ser un buen comienzo de día.
Pasee mirando tiendas cada cual mas bonita que la anterior, seguro que si me pongo a buscar encontraría alguna ganga, conforme iba llegando cada vez estaba mas nerviosa, pero sabiendo como hacer para disminuir mi nivel de ansiedad y nerviosismo pude controlarlo.
Llegue y con determinación entre, le dije al personal de recepción :
- Buenos días, hoy empiezo a trabajar aquí, podría avisar de que llegue.
¿? - Claro que si, un momento.
Cogió el teléfono, marco una secuencia, y al momento empezó a hablar con la directora.
¿? - Siéntese un momento en la sala de espera que ahora baja, esta reunida.
Daniela - Gracias con mucho gusto.
Me fui a la salita de espera . . .
Continuara . . .
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